El proyecto se encuentra en una de las más prestigiadas zonas habitacionales de la ciudad de México. La idea se generó como un cubo de cristal regida bajo el concepto de un cuerpo limpio y perfecto, de una ligereza proporcionada por el mismo cristal utilizado en sus fachadas, acentuándolo con traslucidez que el material mismo nos permite, logrando un carácter de elegancia única en la construcción.

Palmas 810 es una plaza que sirve al mismo tiempo como acceso principal, vestíbulo, área rentable pero lo que la diferencia de otros centros comerciales es que este se convierte una área de exposición desde cualquier punto en el exterior. Cada una de las fachadas mantiene la idea de traslucidez, logrando una ligera visión hacia el interior del inmueble, convirtiendo la construcción en su conjunto en un “gran escaparate”.